Increíble pero cierto. Este cortometraje corre a cuenta del artista Thijme Termaat. A nosotros nos ha cautivado la destreza con la que pinta y mucho más allá la técnica utilizada para mostrar su trabajo.

Gracias al Stop Motion, una técnica que nos permite realizar secuencias con simples fotografías, pero bien combinadas dan su fruto. Thijme consigue adentrarnos en sus pinturas, participar de los matices de sus cuadros acercardonos como ningún museo osaría permitir.

Corren momentos donde es necesario aplicar nuestras mejores técnicas para potenciar el talento y trabajo, algo que Thijme Termaat sabe muy bien como hacerlo.